Situación que término siendo un terrible error, porque se adentró en una zona verde que finalmente lleva a un gigante bosque siberiano. Incluso los adultos de la región entran en el bosque con armas ya que está lleno de osos y lobos. Y ahora la niña caminaba sola por allí. Con S¿su único acompañante: su perrito Maxter pero al final, fue el quien jugó un papel importante entre la vida y la muerte de la niña.
Los padres de Karina llenos de preocupación y remordimiento al haber permitido que su hija saliera sola. Emprenden todas las acciones de búsqueda con los vecinos de la localidad, esto sucedió justo en el mes de julio donde las noches son muy frías; a veces inclusive con temperaturas por debajo de los 0 grados. Luego de varios días ni ellos ni los vecinos logran encontrarla, inclusive los grandes equipos de búsqueda vuelven sin encontrar a la niña. Pasa una semana y luego de 10 días la esperanza de encontrarla con vida va disminuyendo.
Pero oh sorpresa, a los 11 días después de no tener señales de Karina, su pequeño y fiel perro quien partió con ella en busca de su padre, retorna al pueblo. Al principio los equipos de rescate interpretan esto como una mala señal.
Asumen lo peor: que Karina ha muerto en el bosque y su perrito ha vuelto. Pero cuando el fiel y peludo amigo de Karina se dirige de nuevo al bosque, un rayo de esperanza se enciende. Deciden seguirlo, y finalmente no pueden creer lo que ven sus ojos. La niña de 3 años está sentada en el bosque con expresión asustada. Está deshidratada, hambrienta y tiene mucho frío. Pero, por todo lo demás, la niña está bien.
Al parecer su perro le ayudo a sobrevivir en las noches dándole cobijo y manteniéndola caliente. Gracias a su compañero de 4 patas, su viaje involuntario al bosque tuvo un final feliz. Los padres de Karina están felices de sostenerla en los brazos de nuevo. Para rendir homenaje al perrito, en el pueblo han erigido una estatua de este y la pequeña.
fuente: bigbam.net/