Gracias a sus propiedades anti-virales y anti-bacteriales, el ajo puede curar ya sea un resfriado o una alergia o infección provocada por un hongo, lo que hace que sea un remedio económico y natural. A continuación te presentamos algunos de los usos que le puedes dar al ajo.
Combate los hongos: Tiene la capacidad de hacerle frente a las infecciones causadas por hongos, ya sea que se aplique por vía tópica u oral. El pie de atleta o infecciones en la entrepierna pueden ser tratadas con pasta de ajo; además si consumes el ajo vía oral, este puede atacar la infección directamente.
Tratar la tos: El ajo actúa como un expectorante y un antibiótico. Hierve un par dientes de ajo en agua, añade orégano y bebe la mezcla.
Cura el herpes labial: Es un remedio natural para curar el herpes labial. Sólo tienes que poner una astilla de ajo a la zona infectada y dejar que sus propiedades anti-inflamatorias hagan su trabajo.
Un diente de ajo al día te mantiene lejos del consultorio: Mantén a raya los resfriados consumiendo un diente de ajo diario. Puedes comértelo o consumirlo en un té. El ajo posee propiedades antioxidantes que ayudan a combatir los resfriados, al mismo tiempo que ayudan a fortalecer el sistema inmunológico.
Dolor de muelas: Debido a que el ajo es un miembro de la familia allium; contiene una combinación única de flavonoides, así como ingredientes que contienen azufre. Este compuesto ha probado ser eficaz para tratar diferentes enfermedades, entre ellas, las bucales. Simplemente mastica un trozo de ajo fresco, enfocándote en la zona infectada. Poco a poco, el ajo adormecerá el área.
FUENTE: tendenciadehoy.com